Su nombre figura entre los que componen el libro de Paulo Marques "15 Portugueses Ilustres", viaje a lo largo de todo el siglo XX abordando la vida de quince grandes personalidades portuguesas y sus importantes contribuciones en áreas como la literatura, la educación, la cultura, el arte y la política.
Ellos son: Amália Rodrigues, Miguel Torga, Maria Lamas, Sidónio Pais, Fernanda de Castro, António Botto, D. Amélia de Orleães, Francisco Sá Carneiro, Maria de Lourdes Pintasilgo, Tomás Alcaide, Elina Guimarães, José Régio, Maria Matos, Irene Lisboa y Álvaro Cunhal.
Pero, ¿Por qué traemos este personaje a nuestras páginas?
Pues todo empezó con esta preciosa fotografía...
"Ir a España en un coupé descapotable, damas atrás y caballeros delante era un paseo al que no te podías negar. Sin complicadas normas de tráfico, ni pesadas colas, se llegaba a Madrid con este aspecto tan fino y alegre. ¡A posar para la fotografía!
Delante, de pié, está el maestro Almada Negreiros que para estas cosas nunca decía que no. La tercera señora, contando desde la izquierda, es doña Fernanda de Castro".
F. de C.
1º. Su marido, el periodista, escritor y político António Ferro. El hijo de ambos es el conocido filósofo y autor del iniciático Portugal, razão e misterio António Quadros, que tanto nos ha hecho amar y soñar Portugal.
2º. El admirado maestro Almada Negreiros, quien hacía parte de su círculo de amigos de juventud.
Fernanda de Castro (Lisboa, 8 de diciembre de 1900 - Lisboa, 19 de diciembre de 1994) escribió poesía, novela, teatro y una introducción a la botánica. Tradujo a Rainer María Rilke, Katherine Mansfield, Pirandello, Ionesco, Valéry Larbaud, Sófocles, Henri Duveruois y a Maurice Maeterlinck, entre otros. Colaboró en diversas publicaciones periódicas como el Diário Popular y en las revistas Arte Peninsular, Panorama, Ilustração Portuguesa y Portugal Feminino, entre otras.
Se inició a la vida literaria a los 19 años, con la publicación del libro de poesía AnteManhã. Ese mismo año (1919) gana el Primer Premio en el concurso de Teatro Nacional con la pieza Náufragos.
En 1922 participó en la Semana de Arte Moderna de São Paulo y gana la admiración y amistad de Tarcíla do Amaral, Anita Malffati y Owsvald de Andrade, entre muchos otros. Con la novela Maria da Lua (1945) fue la primera mujer en ganar el premio Ricardo Malheiros de la Academia de Ciências de Lisboa. En 1969 le conceden el Prémio Nacional de Poesia.
Pero, ¿Por qué traemos este personaje a nuestras páginas?
Pues todo empezó con esta preciosa fotografía...
Almada con un grupo de amigos portugueses en su Oldsmobile frente al edificio Adriática. Gran Vía esquina plaza del Callao, c. 1927. |
"Ir a España en un coupé descapotable, damas atrás y caballeros delante era un paseo al que no te podías negar. Sin complicadas normas de tráfico, ni pesadas colas, se llegaba a Madrid con este aspecto tan fino y alegre. ¡A posar para la fotografía!
Delante, de pié, está el maestro Almada Negreiros que para estas cosas nunca decía que no. La tercera señora, contando desde la izquierda, es doña Fernanda de Castro".
F. de C.
Fernanda de Castro y José Almada Negreiros |
Su figura nos interesa especialmente porque está estrechamente ligada a otros personajes que nos sedujeron con anterioridad, ahora entrecruzados y que, como ella misma, tuvieron alguna relación con Madrid:
1º. Su marido, el periodista, escritor y político António Ferro. El hijo de ambos es el conocido filósofo y autor del iniciático Portugal, razão e misterio António Quadros, que tanto nos ha hecho amar y soñar Portugal.
2º. El admirado maestro Almada Negreiros, quien hacía parte de su círculo de amigos de juventud.
Y ¿Quién fue esta mujer?
Fernanda de Castro (Lisboa, 8 de diciembre de 1900 - Lisboa, 19 de diciembre de 1994) escribió poesía, novela, teatro y una introducción a la botánica. Tradujo a Rainer María Rilke, Katherine Mansfield, Pirandello, Ionesco, Valéry Larbaud, Sófocles, Henri Duveruois y a Maurice Maeterlinck, entre otros. Colaboró en diversas publicaciones periódicas como el Diário Popular y en las revistas Arte Peninsular, Panorama, Ilustração Portuguesa y Portugal Feminino, entre otras.
Se inició a la vida literaria a los 19 años, con la publicación del libro de poesía AnteManhã. Ese mismo año (1919) gana el Primer Premio en el concurso de Teatro Nacional con la pieza Náufragos.
En 1922 participó en la Semana de Arte Moderna de São Paulo y gana la admiración y amistad de Tarcíla do Amaral, Anita Malffati y Owsvald de Andrade, entre muchos otros. Con la novela Maria da Lua (1945) fue la primera mujer en ganar el premio Ricardo Malheiros de la Academia de Ciências de Lisboa. En 1969 le conceden el Prémio Nacional de Poesia.
Obra poética:
1919 - Antemanhã
1921 - Danças de Roda
1924 - Cidade em Flor
1928 - Jardim
1941 - Daquém e Dalém Alma
1952 - Exílio
1955 - Asa no Espaço
1962 - A Ilha da Grande Solidão
1966 - África Raiz
1969 - Poesia I e II
1989 - Urgente
Novela:
1928 - O Veneno do Sol
1945 - Maria da Lua
1948 - Sorte
1956 - Raiz Funda
1973 - Fontebela
Teatro:
1920 - Náufragos (Peça representada em 1924)
1930 - Nova Escola de Maridos
1943 - A Pedra do Lago (Estreada em tradução romena, por Mircea Eliade, no Teatro Nacional de Bucareste em 1942 e no Teatro da Trindade em 1943)
1961 - A espada de cristal (Peça representada no Teatro Nacional D. Maria II)
Coulisses (inédito, em françês)
Mãe Dolorosa (representada na RTP)
Os cães não mordem (obra póstuma)
Cine:
Rapsódia Portuguesa (1959), realizado por João Mendes (En competición en el Festival de Cannes)
Publicaciones periódicas que dirigió:
Revista Bem Viver (1953-1954)
Actualmente su nieto, António Quadros Ferro, mantiene viva la memoria de su abuela a través de un magnífico blog.
Rita Ferro, otra de sus nietas, destaca estas curiosidades menos conocidas sobre su abuela:
Fue la primera mujer, entre otras tres, en sacarse el carnet de conducir en Portugal; autora de un libro de botánica titulado La vida maravillosa de las plantas; creadora y directora de la Asociación de Parques infantiles; autora de un libro de culinaria titulado Cien recetas sin carne, bajo el pseudónimo de Teresa Diniz, para paliar las dificultades de abastecimiento provocadas por la guerra; tejedora de alfombras de Arraiolos; organizadora del I y II Festivales de Algarve en el castillo de Ofir; decoró los primeros 40 apartamentos de Vilamoura, en Algarve; escribió letras para cine, canción y fado, argumentos para cine y ballet; compuso música; sus libros "Mariazinha em África" y las nuevas "Aventuras de Mariazinha" hicieron las delicias de una generación pero después fueron considerados colonialistas; sus memorias en dos volúmenes fuero considerados "best sellers" en la época; quedó postrada en la cama durante 13 años recibiendo por igual a sus amigos entre flores y un piano; daba un té los jueves donde se jugaba al Trivial y se irritaba cuando no acertaba, Amália aparecía con frecuencia; escribió 4 libros después de enfermar y una novela de 400 páginas hecha al dictado, después de quedar ciega; envió dos días antes de morir, a los 94 años, dos propuestas de programas para la TVI; durante la guerra, tanto ella como mi abuelo arreglaron decenas de pasaportes para judíos huidos, acogiendo algunos de ellos en casa.
Lisboa tiene un jardín con su nombre.
(*) La pintora Sarah Afonso fue la mujer del maestro José Almada Negreiros.
FUENTES:
António Quadros Ferro
Rita Ferro
AGRADECIMIENTOS:
A Teresa Sánchez Lázaro, por sus valiosas aportaciones documentales para poder redactar este post.
DISCULPAS A TODOS LOS SEGUIDORES:
Nuevas obligaciones laborales nos impiden publicar entradas con la misma frecuencia con la que veníamos haciéndolo y estábamos acostumbrados. Esto sólo quiere decir que seguiremos publicando y estando en contacto pero algo más espaciadamente. Muchas gracias.
Lisboa tiene un jardín con su nombre.
Oleo de Sarah Afonso* para la portada de Ao Fim da Memória - Memórias (1906-1939) |
(*) La pintora Sarah Afonso fue la mujer del maestro José Almada Negreiros.
FUENTES:
António Quadros Ferro
Rita Ferro
AGRADECIMIENTOS:
A Teresa Sánchez Lázaro, por sus valiosas aportaciones documentales para poder redactar este post.
DISCULPAS A TODOS LOS SEGUIDORES:
Nuevas obligaciones laborales nos impiden publicar entradas con la misma frecuencia con la que veníamos haciéndolo y estábamos acostumbrados. Esto sólo quiere decir que seguiremos publicando y estando en contacto pero algo más espaciadamente. Muchas gracias.
Antonio, por mi parte estás disculpado.
ResponderEliminar¿Te imaginas pararse ahora en Callao para hacerse una foto?
Hola Rafael, muchas gracias por tu comentario. Pues aunque parezca mentira y con la esperanza de seguir en 1927, hubo alguna que se paró hace poco por allí mismo no a sacarse una foto sino ¡a sacar dinero del cajero!
EliminarAbrazos.
Qué bien leerte Antonio, ya te echaba de menos!! ;)
ResponderEliminar¡Gracias por estar ahí, Cristina! Ya tenia "mono" de escribir y el resto del trabajo ¡Que espere un poco!
EliminarMuchas gracias a ti, Antonio. Por todo: por este homenaje en tu blog a esta gran mujer y por tu agradecimiento.
ResponderEliminar¡Esta mujer es de las que me fascinan!. Los detalles más familiares que aportas unidos con toda la obra tan variada y tan bien hecha que realizó, incitan a seguir conociendo a Fernanda de Castro: 94 años bien vividos.
Invito a conocer su poesía. Aquí, un ejemplo:
Alma serena.
" Alma serena, a consciência pura,
assim eu quero a vida que me resta.
Saudade não é dor nem amargura,
dilui-se ao longe a derradeira festa.
Não me tentam as rotas de aventura,
agora sei que a minha estrada é esta:
difícil de subir, áspera e dura,
mas branca a urze, de oiro puro a giesta.
Assim meu canto fácil de entender,
como chuva a cair, planta a nascer,
como raíz na terra, água corrente.
Tão fácil o difícil verso obscuro!.
Eu não canto, porém, atrás dum muro,
eu canto ao sol e para toda a gente"
Disculpa,...sería un delito cortar esta maravilla.
Ánimo y fuerzas en esta nueva etapa laboral y aquí estamos tus fieles seguidores.
Un abrazo.
Es un pedazo de personaje injustamente tratado, como Amalia, después de la revolución. Su amistad con Salazar, de la que no renegó por honestidad, la condenó al ostracismo. Pero qué te voy a contar que no sepas de F.C...
EliminarAgradecerte de nuevo tu "parceria", buen olfato para encontrar "material de primera calidad" y tus buenos deseos de futuro.
Te adelanto que el próximo post va a ser para chuparse los dedos...
Un abrazo
Hola Antonio!. Otra impresionante historia, de una impresionante mujer. Parece de esas personas, de capacidades ilimitadas, y que todo se le da bien, y a fuerza de ser pioneras, debido a la época que les tocó vivir, marcan la historia.
ResponderEliminarUn abrazo.
Hola José, gracias por tu acertado comentario y disculpa el retraso en contestar (se me "traspapeló")
EliminarHas dicho una palabra clave, pioneros, que define muy bien a ciertos personajes, sobre todo femeninos, y que no son valorados como merecen por la historia.
Un abrazo