No se trata de una competición sino de constatar cómo dos dulces peninsulares de aspecto aparentemente similar son, en su esencia, totalmente distintos. Veamos las diferencias:
- El Bolo Rei es un clásico en la Navidad portuguesa y no falta en la mesa de ninguna casa lusa desde que comienzan las fiestas navideñas, mientras que el Roscón de Reyes sólo aparece en las mesas españolas estrictamente los días cinco y seis de enero.
- El Bolo Rei fue vendido por primera vez en 1869 en la Confeitaria Nacional de Lisboa.
Posteriormente llegó a Oporto en 1890 y se horneaba basándose en una receta traída directamente de París. En 1910 con la proclamación de la República el Bolo Rei estuvo a punto de desaparecer aunque algunos pasteleros siguieron elaborándolo, llamándolo Pastel de Natal. Con el paso del tiempo recuperó su nombre y se sigue vendiendo en cada fiesta navideña en nuestro país vecino.
- El Roscón de Reyes es, según dicen, un dulce originario de la antigua Roma que en estas fechas celebraban las fiestas Saturnalias, en honor del dios Saturno. En dichas fiestas se comía una rosca dulce que escondía en su interior un haba. Hay que recordar que el haba era un símbolo de la fertilidad de la tierra, un símbolo mágico para predecir el futuro echando las habas, y protagonista de cuentos como "Las habichuelas mágicas". Aquel a quien le tocaba el haba se convertía en el rey de la fiesta y los demás le tenían que obedecer. Algunos roscones siguen conteniendo un haba, aunque la mayoría llevan una sorpresa en forma de figurita.
- El Bolo Rei es un dulce más barroco y colorista, más dinastía Braganza, mientras que el Roscón de Reyes es más austero y sobrio en las formas, más dinastía Austria.
- El Bolo Rei lleva añadido en la masa uvas pasas y frutos secos como nueces, piñones y almendras. Además, para aromatizarlo se emplea vino de Oporto que le da un toque de sabor característico, mientras que la masa del Roscón de Reyes no lleva añadidos, sólo está aromatizada con agua de azahar.
- El Bolo Rei hace un maridaje perfecto con una copita de Oporto, mientras que a nuestro Roscón de Reyes le va muy bien unirse a un chocolate caliente a la taza.
A nosotros, personalmente, el Bolo Rei nos resulta más suculento que el Roscón de Reyes, tan delicado él que últimamente los muy golosos lo están desvirtuando y ya no saben con qué rellenarlo, que si crema pastelera, nata, trufa, crema catalana, etc...
No hace falta pasar la frontera para degustar esta delicia de la repostería portuguesa porque, además de ya no existir esa frontera administrativa, en Madrid podemos encontrar Bolo Rei en varios sitios:
- El Café del Art. Mercado de San Miguel. Plaza de San Miguel.
www.cafedelart.com/
- Real Cake. Goya, 27. Princesa, 49.
- Pastelería Lisboa. José Ortega y Gasset, 55. Ginzo de Lima, 56.
- Nata Lisboa. Imperial, 18.
- Nata Lovers. Hermosilla, 58.
- Panadería y Pastelería Azucena. Av. Reina Victoria, 46.
- Pastelería Natas Belém. Plaza de Callao, 1. Goya, 69.
Que lo disfrutéis, siempre con moderación, y para el que sea mas "cocinillas" y se atreva a hacerlo en casa, puede seguir una buena receta que viene en Directo al paladar.
Agradecimiento
A Teresa S. Lázaro, por sugerirnos este dulce post.