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El palacio de Mombello. Fuente: Mª Teresa Fdez. Talaya
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Hasta hace poco tiempo un muro de la escalera principal de la villa de Mombello, propiedad de los Pío de Saboya situada en Imbersago, cerca del lago Como (Italia), exhibía un conjunto de cinco pinturas pertenecientes a los actuales descendientes de la casa de Castel Rodrigo.
La temática y la manera en que se agrupaba el conjunto constituye un problema por si mismo y su significado completo un enigma al que ningún autor ha dado respuesta hasta la fecha.
DESCRIPCIÓN DEL CONJUNTO
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| Las pinturas de la escalera principal del palacio de Mombello.
Fuente: Mª Teresa Fdez. Talaya
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Todo el conjunto está encuadrado en una cartela rococó característica de la segunda mitad del siglo XVIII destacándose en el centro el escudo de armas de los Castel Rodrigo sobre la leyenda Mayorazgo de Castel Rodrigo.
Al lado derecho del escudo se sitúa la pintura titulada Sitio de la Florida rotulado en una filacteria portada por un putti cuya copia del Museo de Historia de Madrid, significado y contenido ya vimos en la anterior entrada.
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| Sitio de La Florida. Palacio de Mombello. Fuente: Mª Teresa Fdez. Talaya |
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| El Palacio de La Florida. Copia. Museo de Historia de Madrid |
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| Paseo de Carlos II. Palacio de Mombello. Fuente: Mª Teresa Fdez. Talaya |
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| Paseo de Carlos II. Copia. Museo de Historia de Madrid Fuente: Pasión por Madrid |
En la fila de abajo está representada, a la izquierda, la Quinta de Queluz. Esta vez un ángel trompetero porta un banderín con el título de A Quinta de Equiluz.
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| La Quinta de Queluz. Palacio de Mombello. Fuente: Mª Teresa Fdez. Talaya |
En el centro de la fila está el monasterio e iglesia lisboeta de São Bento dos Negros, con el panteón familiar de los Castel Rodrigo en la Capilla mayor. El banderín que porta otro ángel trompetero describe igualmente el lugar.
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| São Bento dos Negros. Palacio de Mombello. Fuente: Mª Teresa Fdez. Talaya |
Finalmente, a la derecha, está representada La Torre de La Parada, del Pardo. Su arquitectura difiere ligeramente de la imagen de la Torre conocida por el cuadro de Félix Castelló realizado hacia 1640. En el cuadro de Mombello parecen haberse revestido los muros de ladrillo y pedernal con revoco, variado y recercado huecos y esquinas y eliminados los merlones o chimeneas.
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| La Torre de La Parada (en la filacteria). Palacio de Mombello. Fuente: Mª Teresa Fdez. Talaya |
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| La Torre de La Parada, pintada por Félix Castelló hacia 1640. |
SIGNIFICADO
Este conjunto de pinturas bajo la leyenda de Mayorazgo de Castel Rodrigo representa un inventario monumental de los bienes de la casa organizado con una lógica muy clara: grandes palacios madrileños arriba flanqueando el escudo de armas, el panteón familiar bajo dicho escudo y dos quintas de recreo o pabellones de caza a sus lados. Y es aquí donde se plantean los problemas y enigmas.
AUSENCIAS Y PRESENCIAS
Se sabe que, a pesar del estilo tardobarroco de los marcos y cartelas, de que las pinturas de Queluz y São Bento proceden de otra casa de los Pío cerca de Milán, el palacio de Cusano (habiéndolas llevado a Mombello a finales del siglo XIX Juan Falcó y Trivulzio, XV marqués de Castel Rodrigo), algunas de las imágenes fueron pintadas todavía en el siglo XVII por encargo de Francisco de Moura Corte Real.
El grupo de edificios lisboetas, serían el resultado de pasar a pintura trazos y dibujos existentes de dichos inmuebles. Es el caso de la iglesia de São Bento, pintada a partir de un plano de sección longitudinal del conjunto. El banderín que identifica el cuadro nombra la iglesia como São Bento dos Negros (en referencia al hábito negro de los benedictinos), designación que surge en el testamento de Leonor de Moura dictado en 1706. Hay que recordar que los Castel Rodrigo mantuvieron el patronazgo sobre este conjunto, incluso después de 1640, de ahí su inclusión en el inventario.
En relación a la Quinta de Queluz, la denominación de Equiluz nunca fue utilizada en Portugal por lo que hace pensar que la pintura es muy posterior al diseño original. Por otro lado, entre 1747 y 1757 los Pío de Saboya recuperaron los derechos de los Castel Rodrigo sobre Queluz, alquilándolo a la Casa del Infantado hasta que se vendió definitivamente en 1757.
También consiguieron recuperar y alquilar el palacio Corte Real de Lisboa a la Casa del Infantado en 1750 hasta que fue vendida siete años después por causa del terremoto de Lisboa de 1755. El hecho de que este palacio esté ausente del conjunto de pinturas y las fechas antes indicadas dataría este inventario lisboeta entre 1747 y 1750.
La presencia de los escenarios madrileños plantea las siguientes cuestiones:
- La quinta de La Florida podría estar representada en época de su fundador, Francisco de Moura Corte Real, al estar inacabado parte del palacio y no aparecer todas las fincas colindantes que su fundador fue agregando. Podría ser una obra de mediados del siglo XVII.
- La presencia del Prado de San Jerónimo y la Torre de La Parada constituyen un enigma cuyo significado se desconoce. La leyenda del Prado de San Jerónimo como Paseo de Carlos II sitúa la pintura en el último tercio del siglo XVII y la Torre de La Parada presenta, como ya vimos antes, transformaciones posteriores a la imagen de 1640.
¿Tendrían derechos de Mayorazgo los Castel Rodrigo sobre estos sitios desde la segunda mitad del siglo XVII?
De ser así, ¿por qué no hay referencia a dichos Mayorazgos en ninguna de las documentadas transmisiones, testamentos e inventarios de bienes de los descendientes de Francisco de Moura Corte Real?
La reciente venta de todos los bienes y biblioteca de Mombello dispersa y oculta aún más, si cabe, el legado patrimonial e histórico de los marqueses de Castel Rodrigo, marcado desde su inicio por la controversia, el azar y el olvido.
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| La biblioteca del palacio de Mombello. En la hornacina de la derecha, busto del cardenal Pío de Saboya, de Bernini. Fuente: Mª Teresa Fdez. Talaya |
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BIBLIOGRAFÍA
Damnatio Memoriæ. A arquitectura dos marqueses de Castelo Rodrigo. Paulo Varela Gomes, in ARTE Y DIPLOMACIA de la Monarquía Hispánica en el siglo XVII, dirigido por José Luis Colomer. CEEH, 2003.
El Real Sitio de La Florida y La Moncloa. Evolución histórica y artística de un lugar madrileño. Mª Teresa Fernández Talaya. Fundación Cajamadrid, Madrid, 1999
Gracias, Antonio, por este riguroso trabajo.
ResponderEliminarEn relación con la Torre de la Parada, además del revoco tapando el pedernal (¡qué pecado!) ¿de dónde se sacaría el autor esa especie de colina, que está detrás de la Torre, en el Retiro?
Un abrazo,
Rafael
Hola Rafael,
Eliminar¿Verdad que estaba mejor antes con su pedernal? Esta torre es la del monte del Pardo, pabellón de caza desde Felipe II. La que estaba cerca del Retiro (pza. de la Lealtad) era la Torrecilla de Música que se ve en el Mancelli y en el Teixeira. Con este trueque de Torres igual has resuelto el enigma ya que la torrecilla de música estaba frente al palacio de Lerma, el padre de Uceda (enemigo nº 1 de Cristóbal de Moura, que le obligó a vender sus casas). Eso ya queda para los investigadores.
Muchas gracias y un abrazo
Hola Antonio, menuda investigación, felicidades. Sí que es un enigma, sí, lo de la torre de la Parada. Pero me parece que estás en el camino, me parece que no vas a parar hasta que acabes descubriendo estas incógnitas que planteas. Qué interesante.
ResponderEliminarUn abrazo
Hola Mercedes,
EliminarPara no tener que ir hasta Mombello me compré el libro de T. Fdez. Talaya para poder ver sus fotos y seguir tirando del hilo. No deja de ser curioso que en la vista del Prado aparezca la Torrecilla de la Música. ¿Habrá un traspapelado de Torres del Pardo/Prado como le ha pasado al amigo Rafael? Yo me planto aquí salvo que me patrocinen los Pío de Saboya ;)
Muchas gracias y un abrazo
Ánimo Antonio, el enigma lo tienes, como si dijéramos, en la punta de la lengua. Mucho interés veo, ¿no tendrás de segundo apellido Castel Rodrigo?
ResponderEliminarIncreíbles las dos primeras copias, variando tonalidades, están calcadas.
Exhaustivo trabajo, felicidades. Un abrazo.
Muchas gracias Manuel,
EliminarSi tuviera que ver algo con ellos casi no podría entrar en Portugal aunque reconozco que tener ese palacio en Italia molaría bastante. El enigma está ya cuasi pero como le decía a Mercedes, hasta aquí hemos llegao.
Me alegro que te haya gustado. Un abrazo
Hola Antonio:
ResponderEliminarMuchas felicidades por este post, lleno de incógnitas pero también de grandes descubrimientos (al menos para mí, porque hasta ahora pensaba que solo existía una representación de la Torre de la Parada, la de Castelló, y la que nos adjuntas creo que aporta mucha información sobre este emblemático edificio de los Austrias).
Solo espero que la venta de los bienes y biblioteca de Mombello no sea un obstáculo para que la información pueda fluir y que sea accesible.
Muchas gracias por el doble enlace y por la generosa mención que me haces. Es un honor.
Un abrazo, Jesús
Hola Jesús,
EliminarHa sido como una carambola. Cuando vi que todas las pinturas de Mombello tenían un angelote (la verdadera palabra en singular es putto, pero suena tan mal...) con leyenda, me puse a recordar hasta que di con tu post del Prado de S. Jerónimo y de ahí al de la torre de La Parada. Con los medios y el tiempo disponible, mi labor no da para más, pero la incógnita continua. Ojalá que toda la documentación caiga en las manos adecuadas y no se disperse después de más de cuatro siglos agrupada.
Gracias a ti y un abrazo
Gracias a carambolas como éstas y a tu pericia y buen olfato he descubierto un montón de cosas nuevas, que me han dejado boquiabierto. Gracias nuevamente.
EliminarJesús, yo por mi parte me alegro mucho de que haya habido interacción entre blogs. Es algo que da ánimos.
EliminarPor cierto, recomiendo ver las fotos desde Chrome (igual estoy diciendo una obviedad...)
Un abrazo
Hola Antonio,
ResponderEliminarCada día subes más el listón para los iletrados como yo en estas materias...y mira que encierran misterios los bienes de los Moura- Castel Rodrigo.
Quien no te podrá patrocinar será la Fundación Cajamadrid ¡ con la labor cultural que desarrolló !, tristemente finiquitada ya sabemos todos de qué manera.
Adelante con los enigmas y un abrazo.
Hola Teresa,
EliminarQué pena de Fundación, como bien dices, qué labor cultural tan impecable desarrolló. Tuve que comprar el libro de La Florida editado por la Fundación Cajamadrid y cuando fui a pagarlo casi me da un síncope pero es de gran calidad.
Ahora toca bajar el listón pero con tantos misterios me ha quedado un gusanillo...
Gracias y un abrazo
...Tampoco te tomes al pie de la letra lo de bajar el listón... los retos y los misterios activan las neuronas que con estas lluvias y fríos necesitan motivación.
EliminarUn abrazo.
Si si, pero también hay que alternar este nivel misterioso con algo mais terra à terra como fados, doces, bacalhau... ;)
EliminarUn abrazo
Qué curioso...tirando del hilo la de cosas que aparecen...gracias por este estupendo artículo
ResponderEliminarGracias a ti, Carlos. ¿Has visto el siguiente, con alguna novedad?
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