Portada de la obra. |
El gran humanista y franciscano Gaspar Barreiros (Viseu 1515-1574) era sobrino del célebre historiador João de Barros, cronista de los descubrimientos y conquistas marítimas de los portugueses. Alentado por su tío, quien se ocupó de su erudita educación, Gaspar fue enviado a Italia como embajador de Portugal por el infante cardenal D. Enrique en gratitud al papa Pablo III por el capelo cardenalicio que este le había concedido en 1546, durante el reinado de su hermano D. João III (1502-1557).
Como cronista y cartógrafo aprovechó ese largo viaje, que comenzaba en Badajoz y terminaba en Milán, para escribir una larga descripción de los lugares por donde pasaba con el título de Chorographia y que hace parte de la extensa literatura de viajes del siglo XVI. El largo título completo de la obra dice, en un bello y arcaico portugués:
Chorographia de alguns lugares que stam em hum camino, que fez Gaspar Barreiros ó anno de M.D.XXXXVI, começãdo na cidade de Badajoz em Castella, te á de Milam en Italia, cõ algúas outras obras, cujo catalogo vai scripto com os nomes dos dictos jugares, na folha seguinte.
El original de la obra se escribió quince años antes de que la villa de Madrid, por donde pasó, fuese sede de la corte y se editó en Coimbra en 1561, cuando nuestra ciudad ya era capital permanente de la monarquía española y en Portugal, durante la minoría de edad de D. Sebastián (1554-1578), nieto del fallecido rey, el cardenal infante D. Enrique se disputaba la regencia con su cuñada Dª. Catarina de Austria.
1ª página del relato madrileño de la obra. |
Gaspar Barreiros dedica a Madrid seis páginas repletas de datos interesantes donde asegura que hay boas fontes e muitos poços, que por entonces era una villa de 4.500 vecinos poco más o menos con unos 20.000 habitantes reales en total (aunque se queja de que siempre le exageran el número de vecinos de los pueblos que visita) y que al estar en alto parece más grande de lo que en realidad es.
Describe algunos de los conventos más importantes de la época, especialmente el de monjas de Santo Domingo el Real, el de San Francisco y el de Los Jerónimos; cita algunos enterramientos que hay en ellos como el del rey D. Pedro de Castilla en el primero de ellos y el de la reina Juana de Castilla, esposa de Enrique IV, en el segundo; encuentra Madrid en una comarca de mucho pan, vino, aceite, caza, frutas y ganado, de tener buenos aires, fértil y abastecido de todas las cosas por lo que reside en ella muchas veces la corte.
Murallas y puerta de la Vega en el plano de Teixeira. 1656. |
"MANTUA CARPETANORUM SIVEMATRITUM URBS REGIA" Leyenda del plano de Teixeira. 1656. |
Donde Lucio Marineo dice que S. Dámaso es natural de la villa de Madrid, Gaspar Barreiros asegura que lo es de Gimarães y donde el primero dice que S. Vicente y sus hermanas eran naturales de la ciudad de Ávila, el segundo asegura que eran de Évora, donde estuvo su casa natal convertida más tarde en iglesia, mientras que Ávila fue el lugar donde padecieron martirio.
No deja de ser curiosa la existencia de múltiples similitudes entre las amuralladas ciudades de Évora y Ávila, desde la toponímica a la espiritual pasando por la morfológica, topográfica, etc.
Grabado de la obra. |
Grabado de la obra. |
Colofón de la obra. |
BIBLIOGRAFÍA
Recuerdos portugueses en Madrid. José María Sanz García. Instituto de Estudios Madrileños. 1992.
Chorographia. Gaspar Barreiros.
IMÁGENES: Biblioteca de la Universidad de Sevilla. Fondo antiguo.
Guaaau!! Fantástico y documentadísimo artículo. Compruebo con satisfacción que nuestro admirado Gaspar Barreiros ha encontrado su mejor acomodo en tu blog, que es donde realmente le apetecía estar, después de la fugaz visita que hizo al mío (por cierto, mil gracias por el enlace). Y, al final, se confirman tus sospechas de la existencia de tapial en las murallas. Si es que no se te escapa ninguna.
ResponderEliminarUn artículo redondo. Un abrazo, Jesús
No se si está mejor acomodado en mi blog que en el tuyo, el caso es que se está pegando un viaje virtual por la madroñosfera que ya quisieran muchos. Gracias a que me lo "presentaste" en tu blog, he disfrutado un montón leyendo su texto original y confirmando muchas cosas como la que dices del tapial o el enterramiento (desaparecido, como tantos en esta querida ciudad) de la ¿incomprendida? reina Juana de Avis (madre de la Beltraneja) en el monasterio de S. Francisco.
EliminarGracias y un abrazo
Un artículo interesantísimo, Antonio.
ResponderEliminarComo el Madrid que debió ver don Gaspar, antes de que comenzaran a derribar la muralla.
Y un lujo, traducido y contado por ti.
Un abrazo
Me alegro mucho de que te haya gustado, Mercedes. Hay un detalle que se me ha pasado por alto y es cuando habla sobre los palacios del rey: "todavía ahora se acaban de hacer". Y es que el debió ver el Alcázar entre 1546 y 1549, justo cuando se estaba concluyendo la segunda fase de las obras de ampliación con el patio grande (de la reina) y la fachada de Covarrubias. No llegó a ver la Torre Dorada ni las obras clasicistas empezadas en 1559 por Felipe II ¡Qué pena!
EliminarMuchas gracias y un abrazo
Hola Antonio,
ResponderEliminarNo conocía nada de Gaspar Barreiros, sin embargo, gracias a tu interesante artículo, a los comentarios de tus amigos y a lo poquito que he ampliado ... me parece que nos hemos perdido una gran película al estilo de " El nombre de la rosa "- también era un franciscano - , ¡ y no pocas y cinematográficas aventuras tendría Gaspar atravesando los caminos ibéricos en el siglo XVI.!
Aprendemos mucho de estos personajes de nuestra historia Ibérica con Pessoas en Madrid.
Un abrazo.
Hola Teresa,
EliminarHay detalles en su biografía muy curiosos como el que al hacerse amigo de S. Francisco Javier se unió a la Compañía para poco más tarde regresar a la orden Franciscana. Tienes razón con lo de la película, el guión ya está escrito, sólo hay que ir siguiendo el itinerario y escoger las localizaciones.
Gracias por tus palabras y un abrazo